Las Eras de la Xenarquía (IX)

La Tercera Era

En la cronología oficial de los Archivos de Korg-2, se presume que la tercera Era de la Xenarquía se inició con la caída del Imperio de Luz, en el año 326-K, (aproximadamente el 2650 en la cronología gregoriana) aunque no se sintió el nuevo equilibrio de poderes hasta varias décadas después, el interregno entre la Caída del Imperio y la Aparición de los tres poderes es llamado los Tiempos confusos, y está caracterizado por la pugna por los poderes y la tecnología del siglo del imperio, así como por los recursos de los sistemas más valiosos.

Un caudillo notable de esta época fue Zheng Chan, originalmente del planeta Chang'an, organizó una expedición hacia dos de los sistemas más codiciados en aquel entonces: Dhalion y Alfa, siendo rechazado ambas veces y estableciéndose sin embargo en una estación espacial cercana al tercer planeta del sistema Alfa.

Zheng reparó entonces en la extraña formación que aparecía a unos cuantos años luz de distancia, compuesta de enormes extensiones de materia y restos de naves espaciales de origen desconocido ("el borde") convirtiéndose así en el primer jinete.

Seis años-K después, emprendió una expedición hacia el borde, y trás repostar, se dirigió hacia el sistema solar más cercano par recargar las baterías nucleares de sus astronaves.

Fue lo último que se supo de él.

Las transmisiones de su nave, la Dai, fueron captadas por las estaciones de Alfa varios años después de su partida, aunque su contenido aun continúa siendo un misterio. Chan hablaba de monstruos espaciales, planetas vivos y una puerta hacia ninguna parte, cosa que, además de absurda, no ha sido posible comprobar.

Extraído de los registros históricos de Draco Milicevic, biblioteca del Senado, Korg-3

Las Eras de la Xenarquía(VIII)

La Red Gruyere y la puerta del Trueno

Uno de los mayores misterios -de entre los muchos existentes- acerca de los tiempos de la caída del Imperio es la aparición "espontánea" de la red de agujeros de Gusano (conocida como red Gruyere) que circundan -aparentemente- la Galaxia.

Incialmente usada como un medio de mantener enlaces de datos en tiempo real entre dos puntos cualesquiera de la Galaxia, era el método de comunicación preferido entre las órdenes. Las astronaves eran capaces de abrir y cerrar agujeros de gusano lo suficientemente grandes como para transferir señales de datos codificadas en láseres de alta energía o pulsos de microondas.

De algún modo que los teóricos de los tres poderes aun no se explican,durante la gran batalla entre las órdenes varios de estos agujeros de enlace de datos inciaron un proceso de crecimiento inflacionario, llegando a formar en algunos casos, entradas de varios kilómetros de diámetro de naturaleza permanente, es decir, se ha generado un campo contenedor que mantiene a la materia exótica dentro del agujero de gusano.

Algunos de estos teorizan que la activacìón final del pilar de luz del templo de Terra Incognita, en Glisten (que se sospecha era una forma Calabi-yau altamente estable) provocó un eco inmediato en el vacío cuántico, generando vortices de improbabilidad tan grandes que colapsarían en un estado exótico de la materia, generando así la red de agujeros de gusano. Aunque, tomando la terminología de un Astronomo Terráqueo de los tiempos Pre-K, Alastair Reynolds, se les ha dado en llamar Materia Patólogica

Esta red ha permitido la democratización del viaje estelar,monopolizado por los Korg y las órdenes antes de esto.

Una leyenda entre los astrogadores de espacio profundo es la de la Puerta del trueno, relativa a un agujero de gusano de una sola vía (no conectado a la red) cuyo otro lado se abre a una estación espacial cerca del centro de la Galaxia, donde varias reliquias del pasado tecnológico esperan a un descubridor. De la ubicación de esta puerta sólo se sabe que estaría en una nube de Oort, rodeada de enormes tormentas electro-magnéticas, de lo cual recibe su mítico nombre.

Otro agujero de gusano, ubicado aparentemente en la órbita del planeta saturno -en el sistema solar primigenio- se sospecha que contiene una entrada lateral accesible al oráculo, aunque no ha podido probarse debido a la reticencia de la Orden de los Conservadores a recibir extraños.